miércoles, 26 de marzo de 2014

BANKIA JUEGA CON LAS PALABRAS

Hoy por enésima vez he oído, que no visto, el último anuncio de esta caja de ahorros. Aquél en el que dice que tiene a disposición de sus clientes no sé cuántos miles de millones para "dar" a quien se lo pida. El anuncio, insisto, está bien construido, en mi opinión. Y hasta resulta gracioso. Pero Bankia no "da" dinero. Como mucho lo "presta".

Y ése es el juego que no me parece honesto jugar. El de las palabras que dicen lo que no quieren decir. Porque en castellano "dar" tiene una clara connotación de no esperar nada a cambio y de buena fe por parte del que da y del que recibe. Nada de eso entiendo que existe en la entidad que dice que "da" pero que no "da" sino que "presta".

E ignora en el anuncio las condiciones en las que presta ese dinero. Porque eso y no otra cosa es lo que debería anunciar: el cómo va a ser posible que cualquier cliente devuelva ese dinero que la entidad financiera le presta, no le da.

Uno siempre pensó que la publicidad tiene una dimensión informativa que no es lógico obviar. Bien es cierto que cabe la posibilidad de que se exageren las cualidades de un producto o servicio  se disimulen un tanto sus defectos. Pero de ahí a dejar a un lado lo esencial va un trecho. Claro, que lo único cierto es que la caja de ahorro sabe que nadie en su sano juicio puede pensar que va a "dar" unos euros sin más. Y juega con la ambigüedad del lenguaje.

Y eso, por mucho que parezca, no me parece justo.